LONDRES-. La organización británica de derechos humanos y autodeterminación, Sandblast, ha expresado su profundo pesar y consternación por el cambio de postura oficial del Reino Unido sobre el conflicto del Sáhara Occidental, tras la declaración de apoyo de Londres al plan de autonomía marroquí propuesto en 2007 y ha calificado esta postura de « retroceso moral y una traición política al derecho de autodeterminación».
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En una carta oficial al ministro británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, girada por la directora fundadora de la organización, Danielle Smith, esta ultima calificó este cambio de «profundamente lamentable», señalando que constituye un grave retroceso moral en el apoyo a los derechos históricos del pueblo saharaui, que lleva más de medio siglo luchando por su legítimo derecho a la autodeterminación.
«Conceder este tipo de legitimidad a una propuesta poco clara, .., es una clara negación del derecho de un pueblo colonizado a elegir libremente su futuro político», añade la ONG británica.
Sandblast también advirtió de que cualquier solución impuesta a los saharauis sin garantizar un nivel mínimo de justicia, dignidad y derechos básicos no puede considerarse aceptable ni legítima, especialmente bajo la ocupación marroquí, que es testigo de documentadas violaciones de los derechos humanos y discriminación sistemática contra la población indígena del territorio.
La organización subrayó que el cambio de postura de Gran Bretaña, como miembro permanente del Consejo de Seguridad, representa un preocupante retroceso en sus obligaciones internacionales y refleja, segùn sus palabras, «una traición política que se suma a la serie de decepciones a las que se enfrenta el pueblo saharaui por parte de las potencias occidentales, que han llegado a favorecer los acuerdos económicos con Rabat a expensas de los principios y valores internacionales».
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