
ARGEL-. Los países africanos celebran el domingo el Día Mundial de África, en conmemoración de la fundación de la Organización para la Unidad Africana (OUA) el 25 de mayo de 1963, una ocasión para demostrar su compromiso con los principios de la organización.
La firma, en Addis Abeba, de la Carta constitutiva de la OUA, que se convirtió en la UA en 2002, es un «hito» en la historia y la memoria colectiva africanas, que los pueblos africanos celebran cada 25 de mayo en recuerdo de la creación de esta organización regional, fundada sobre el principio de la descolonización y la lucha por el ejercicio del derecho a la autodeterminación.
Según la Carta, la organización se creó para salvaguardar la soberanía y la integridad territorial de los Estados miembros, promover la unidad y la solidaridad entre los Estados africanos, coordinar la cooperación al desarrollo y reforzar la cooperación internacional en el marco de las Naciones Unidas, la «única vía» para que los africanos construyan un continente «seguro» y «próspero».
Aunque la organización ha trabajado, desde su creación, para eliminar los vestigios de la colonización y el apartheid, contribuyendo a la resolución pacífica de muchas disputas fronterizas, lo cierto es que hoy el continente es escenario de numerosos conflictos armados, el más antiguo de los cuales es el del Sáhara Occidental.
El Sáhara Occidental, última colonia de África, figura desde 1963 en la lista de territorios no autónomos de la ONU y sigue esperando su descolonización. Marruecos se niega obstinadamente a cumplir los compromisos que adquirió al firmar la Carta de la OUA, que insistía en el principio de la inviolabilidad de las fronteras heredadas del colonialismo, y a aplicar el plan de arreglo del conflicto elaborado por la ONU y la OUA.
El ministro de Estado, Asuntos Exteriores, Comunidad Nacional en el Extranjero y Asuntos Africanos, D. Ahmed Attaf, declaró que «África sólo podrá pasar, de una vez por todas, la última página de la historia del colonialismo permitiendo al pueblo saharaui ejercer su derecho inalienable e imprescriptible a la autodeterminación». SPS/APS