Marruecos ha expulsado desde el 2014 a 329 observadores internacionales de las ZZ.OO del Sahara Occidental

Vie, 26/12/2025 - 21:30

EL AAIUN (Ciudad ocupada del Sahara Occidental)-.  Marruecos ha expulsado desde el 2014 del Sáhara Occidental a 329 observadores internacionales, parlamentarios, defensores de los derechos humanos y periodistas procedentes de 21 países, los últimos de los cuales eran dos defensores de los derechos humanos de la organización No Violencia.

En un comunicado conjunto, la Liga para la Protección de los Presos Saharauis en las Cárceles Marroquíes (LPPS) y la Asociación Francesa de Amistad y Solidaridad con los Pueblos de África (AFASPA) afirmaron que las autoridades de ocupación han expulsado, durante el año en curso, 27 extranjeros, entre ellos parlamentarios, defensores de los derechos humanos y periodistas procedentes de España, Estados Unidos y Portugal, en el marco del bloqueo impuesto a las Zonas Ocupadas del Sahara Occidental.

Noruega encabeza la lista de países cuyos ciudadanos han sido expulsados por las autoridades marroquíes con 133 personas, seguida de España (105), Suecia (9), Italia (6), Estados Unidos (6), Francia (6), Polonia (5) y Reino Unido (4).

   Las mismas fuentes precisan que, en los últimos años, Marruecos ha expulsado o prohibido la entrada en las ZZ.OO a siete ONG internacionales de derechos humanos, como Human Rights Watch, Amnistía Internacional, Nonviolence, Novact o la Fundación Carter, con el fin de impedirles constatar las graves violaciones de los derechos humanos cometidos contra el pueblo saharaui y el saqueo de los recursos.

 Añaden que la ocupación marroquí ha prohibido por noveno año consecutivo al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos el acceso a los territorios saharauis ocupados.

 El hecho de que la MINURSO (Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental) no haya sido dotada de prerrogativas que le permitan registrar y controlar las violaciones de los derechos humanos cometidas en las ciudades ocupadas ha permitido a Marruecos continuar con sus crímenes contra la población civil saharaui.

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